El EPN amoroso en Tampico

Siempre he pensado que lo más importante de una campaña política no son sus candidatos, si no los asesores detras de él, y que ayudan a la figura. Pero no solo a la imagen, al mensaje corporal, a la expresión, a pensar, criticar y reaccionar, incluso de negociar. Enrique Peña Nieto estaba totalmente noqueado después de la afrenta con estudiantes de la Universidad Iberoamericana, su campaña cayó totalmente. Recordemos que el detonante fue este enfrentamiento por falta de estrategia y asesoría. Porque si a Enrique Peña Nieto se le hubiera dicho que criticar y descalificar las manifestaciones en su contra, y más que nada en contra de la sobre protección de los medios de comunicación, quizá habría salido bien librado. La diplomacia ante todo. El vuelco costó la caída de su popularidad y el aumento de sus puntos de su principal crítico, Andrés Manuel López Obrador. Ante ello, finalmente se hizo evidente el secreto a voces; que el PAN, ese PAN segregado, el de Espino enviado por Fox, el de Fox enviado por el mismo Vicente Fox, si está operando a favor del PRI. Una estrategia emergente adquirir valores de otros partidos, pero no solamente atraerlos, si no demostrar que es un proyecto de unidad de valores por un nien común. Quizás figuraciones mías, pero ese argumento de panistas buscando conciliación, quizá idea pulida del propio AMLO, tiene un criterio significativo; envir un mensaje sentimental sobre la unidad de los buenos. Debo decir que no veo nada nuevo en el mensaje, ni contenido, ni argumento, ni sustento, pero es entender la imagen de un nuevo PRI con los viejos priístas y los nuevos priístas, pero también con nuevos y viejos panistas, y nuevos y viejos perredistas. Y se pone amoroso. Llama a la conciliación y al respeto. Un discurso adelantado porque generalmente es del ganador. A Tampico llegó un Enrique Peña Nieto nervioso, ansioso, temeroso, de que la campaña no salga como está planeado, tratando de sonreír a todo y a todos, de saludar a todo y todos, queriendo humanizarse. Algo que no se vió al inicio de su campaña ni en sus spots, y en los que hoy come en una mesa humilde mientras explica su proyecto. Su escenario no se llenó, en parte por el blindaje y en parte por su pelea desde atrás. Alguien me dijo, "no se ve bien, no se siente seguro" y asiento ello, porque cambió radicalmente su postura. Cantinflea porque no es su discurso. Sigue trayendo a su "gaviota" como ancla, pero no su discurso soberbio. Prácticamente creo que a 25 días, como el precisó contando en alto su reloj progresivo, sabe que arriesga mucho, pero también sabe que ya no puede confrontarse, y se pone amoroso.