Men of Honor de Adrenaline Mob... otro de la generación de las superbandas
Me gusta hablar de los supergrupos. Siempre tienden a un resultado más marcado que un disco convencional porque las expectativas siempre son más altas. Los supergrupos cuentan con estrellas, son un crossover, algo excitante, que simula el mismo efecto cuando un guionista chingón se suma a director de moda y un actor de renombre en una película, o dos escritores anclan una historia, o deportistas famosos hacen dúo o terna. Un "dream team", si recordamos aquella quinta, por decirle así, que representó a Estados Unidos en basquetbol, en las olimpiadas de Barcelona 92. Bueno, pero este espacio es de música, y en música los duetos, versiones, y en el rock, los supergrupos, siempre se cocerán diferente, llevan aderezo, vienen preparados, y pueden ser, por las altas expectativas, indiferentes o amargos al paladar, aunque también, ese virtuosismo y el que tenga el músico fama de sobras, también los exenta de la rudeza en muchas ocasiones. Yardbirds, Crosby, Still and Nash, Em