¿En busca de Carmen?
No es difícil entender como en un momento, un impulso, una palabra, por pequeños que parezcan, pueden convertir las dudas en decisiones, y una de ellas a su vez cambiar el rumbo de una vida. Ese presente, que tras el tiempo se transforma del amor, de la pasión, las sensaciones y el propio sentimiento, a la costumbre, hastío, en la represión de sueños y anhelos, cariños que inventan corazas de frustraciones, y que se alimentan de deseo, de vuelos entre el pasado y el futuro, poco o mucho alejados del momento. En ese momento David Toscana trasmite el sentimiento frustrado de dos épocas, la leyenda de Juan Capistrán a mediados del siglo XIX en Tula Tamaulipas, la pérdida del amor en medio de la tragedia natural de un pueblo sin futuro, y la de Froylán Gómez, un escritor que tras conocer a un viejo en un asilo, conocer su historia, e intentar comprender para transcribir su leyenda, hasta convertirla en su propia vida, ambos con el deseo llamado Carmen, un Carmen en sinónimo de sacrificio,