El día después del día de la familia

No podemos resanar el tejido social, recuperar una sociedad si el hilo que la conforma, la familia está rota.

En la vida como la conocemos, el vínculo familiar era la primera escuela, la básica, la de los valores y la formación cívica y moral como individuo. Luego la escuela la llevaba al sistema colectivo.

Aquí se entablan los valores principales como son el respeto, la honestidad, la disposición, la ayuda a los demás y el derecho ajeno, sí, ese de Don Benito Juárez.

Sin embargo hoy por hoy, decenas de factores generan que poco a poco, se pierda el valor de la familia.

Ah esto, todos los círculos civiles culpan este disentimiento como la causa de todos los problemas en México, sobre todo del rompimiento de la sociedad y su degradación.

Los factores para que la familia haya entrado en un periodo de semi descomposición en México tiene factores locales y externos, porque el valor de la familia ha caído sensiblemente a nivel mundial.

Primero, uno de los factores más importantes ha sido el tema de la globalización y la emisión y traslado de mensajes que podían haber sido, propios de alguna generación, y que ahora, llegan a otro destino  se adoptan en otros sitios como donde no están preparados, es decir, inducir ideas liberales a una sustancia conservadora o viceversa.

En medio de esta globalización, el valor a la profesionalización y el desarrollo individual, la idea de crecimiento personal, es hoy, una tesis de la vida futura que, atenta contra la familia.

Las nuevas generaciones, están expuestas al crecimiento individual, a la exposición de valor trabajo contra la familia, esa es una realidad que solo necesita un par de click´s en cualquier ordenador.

Sin responsabilizar, tan solo la teoría feminista, también es un factor, que si bien, no está diseñado para afectar a la familia, por supuesto que si la pone en riesgo o retrasa, y a su vez se hereda.

Otro factor, al otro extremo de la sociedad actual, es ese grupo de personas a quienes no llegaron los mensajes de superación, y quienes a edad infantiles forman familias.

Esto genera, familias jóvenes y divorcios tempranos y masivos, a su vez hijos abandonados que adquieren patrones. Pero la principal distensión es la falta de raíz en los valores familiares. Inculcar esa base, así como se inculca la fé, la obediencia o el trabajo.

En medio de una sociedad violenta, liberal más que libre, sexualista y desinhibida, pero sobre todo expuesta, la comunicación al interior de cada una de las casas, las sesiones interiores, de confianza, de sonrisas y de proyecciones, deben ser fortalecidas.

Presentó este escrito un día después del día de la familia, porque ayer todos tuvieron comilona, pero podrían tenerla en cualquier momento.