Ciberamor, cibersexo, cibercelos ¿siguen orgías en twitter?

A veces siento que no pertenezco a este mundo. De repente me doy cuenta que ha evolucionado demasiado en tan pocos años y es entonces que debo considerarme conservador, porque aunque esta idea me ha aterrado durante mis tres décadas de alegre y emocionante existencia fresca y primaveresca, me he quedado perplejo.
 Realmente nunca fui un sujeto que le espantara lo nuevo, es más, soy de los que les gusta experimentar, y así como he probado muchas cosas y sorpresas que da la vida, también ante las grandes oportunidades de la tecnología he intentado todo tipo de anormalidades (dícese en el vocabulario arcesco).
No solo en grabarse en una relación íntima con una walkman de casette o con un celular, es desde enseñar mis cosas en una guebcam si en el temor de ser subido al yutub, hasta el tener novias vía internet, pero esta vez, si me chingaron.
Yo sé y entiendo que hay muchos casos en que sin deberla ni temerla, mucha gente aprovecha estos medios para relacionarse, ante la incapacidad de hacerle de frente ante otras personas, he visto muchas personas tímidas que se convierten en interesantes platicadores tras un monitor y una pantalla de computador, que pierden el temor de intercomunicarse directamente, y lo hacen mediante la escritura porque se  sienten seguros a solas, por eso desde hace muchas eras existen los diarios personales, y eso es bueno.
De ahí la evolución natural marcó el nacimiento de relaciones duraderas, desde una amistad entrañable, compadrazgos, noviazgos y matrimonios, toda la magia de las ciberelaciones creciendo a velocidad de 320 kb con intel celerons y muchas cosas de esas que no entiendo bien, pero sin alargarme mucho, que mas desearía, vi en unos segundos todo lo que conlleva una relación de estas.
Porque me sorprendí, debo decirlo, me sorprendí, al ver, bueno, leer una escena de celos, no una plaza, no un café, no un cuarto de motel, en un ordenador… gooeiiii… juro que yo como simple espectador de rebote solo esboce una sonrisa maliciosa y recé porque no se cortara la comunicación.
Mi emisor en turno me relataba con gracia amena la historia, como un amigo mio de mi, directamente se había relacionado con una mujer a muchos cientos de kilómetros de distancia, mediante la magia del internet, una relación que había cumplido algunos meses, tantos significativos para que surgiera sentimiento.
Pero, por equis y que por ye, hubo una serie de inconvenientes y malentendidos telenovelescos sin to be continued… que provocó no solo lágrimas de cocodrilo en la fémina, el coraje en el novio, la ruptura del noviazgo, y finalmente que todos, incluyendo a quien afligidamente contaba la historia, se mandaran directo a la chingada.
Yo estaba interesado, a web que estaba interesado, primero, porque por naturaleza nos gusta el chisme, y segundo porque mi idiosincrasia de rancho no me había permitido imaginarme una situación de estas, desde el escenario hasta todos los factores (romance cibernético, besos cibernéticos, piropos cibernéticos, peleas cibernéticas, truenes cibernéticos y terceros en discordia que provocan celos cibernéticos, y un testigo cibernético o séase yo) para hacerme un chingo de preguntas….
1.       Como pueden un par de sujetos llegar a esos extremos de "me dejaste plantada", "si te la pasas viendo viejas", "¿Dónde estabas eh, donde estabas?" no me hables"
2.       Que le dices a una pareja que solo ves por la webcam.. ¿que bonito lente tienes?
3.       De quien te encelas si a webo lo conoces a él, y mas o menos
4.       Me impresiono cuando veo que una chiquilla quinceañera  (o) termina mal tras confiar en una relación virtual…. Pero que pienso de una veinteañera (o) o treintañera (o)
5.       Se masturban antes, en o después de una sesión web???
6.       Si hay ciber relaciones, con ciber amor, ciber sexo  y hasta ciber celos ¿sigue las orgías por twitter facebook ????



Windows Live y Samsung equipan tu casa. Participa y gana!

Bing: Ahorra tiempo y clics cuando buscas en Internet

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Felicidades, primero que nada. No te conocía los dotes de una buena inspiración y que esta se haya dado por cuestiones cibernéticas.

Me encanto! debo decirlo y confesarlo... No cabe duda lo observador que eres...

Saludos y besos!!!!!

La pekes Soy Yo

Entradas populares de este blog

The Cranberries en Tampico. Un concierto demasiado grande para una ciudad pequeña

Un genio bipolar. Devin Townsend

De mi soundtrack: Los puentes de esperanza (Brindges in the sky)